Este blog es principalmente para los participantes del club de lectura de Fontanar en Guadalajara. Se puede escribir comentarios de los libros leídos, obviamente, pero no se permiten ofensas personales. Y se ruega que en los comentarios se identifique el autor.
Bueno ya me lo he terminado... La verdad que esta tercera parte me ha parecido mas interesante q las demás, por lo menos me ha enganchado mas, tal vez porque ya nos hemos adaptado a Madame Bobary, y ahora la,intensidad del libro se hace mas fuete. Me ha gustado, no me ha entusiasmado pero es entretenido, y sobre todo describe fenomenal.
ResponderEliminarPuri
Madame Bobary me ha parecido una novela muy interesante. Aparentemente es una simple historia de adulterio, pero hay que situarla en la época histórica y el contexto social en el que está escrita para entender algunos aspectos que resultan o bien “pesados” o bien “incomprensibles” para nuestra mentalidad actual.
ResponderEliminarMadame Bobary fue una de las primeras novelas de la Literatura Realista del S.XIX y hay que entenderla como una novela ROMPEDORA CON LOS CÁNONES DE LAS NOVELAS QUE HASTA ENTONCES SE HABÍAN ESCRITO (mitad del XIX). Estas novelas anteriores se encuadraban en la llamada Literatura Romántica y no por tener este nombre eran novelas caracterizadas exclusivamente por tener una temática amorosa, sino que se caracterizaban por situar la acción en escenarios lúgubres, tenebrosos, oscuros (noches, bosques, cementerios, ruinas…), por tener temáticas sobrenaturales (milagros, apariciones, fantasmas…), por reflejar en el argumento el sentimiento del autor que casi siempre solía ser melancólico e idealista, por preferir para el desarrollo argumental épocas medievales o escenarios exóticos, y por no profundizar en las razones o en la psicología que movían a los protagonistas a actuar como lo hacían. Un ejemplo clarificador de esta literatura romántica son las “Leyendas” de Bécquer.
Y tras esta literatura romántica, aparece publicada Madame Bobary, que ni se sitúa en escenarios exóticos o medievales, ni tiene una temática fantasmal o tenebrosa, ni rebosa melancolía. Se sitúa en la misma época que vive el autor, Flaubert (mitad del S.XIX) y cuenta una historia de adulterio que está provocada por la obsesión de Emma por las novelas románticas (¡ojo!, no por las novelas de amor simplemente, sino por las novelas con las características vistas anteriormente de la literatura romántica). Por tanto, es algo más que una historia de adulterio, es una crítica pura y dura a las novelas publicadas hasta entonces y cómo podían influir en la mentalidad de las mujeres de la época.
Madame Bobary, la novela, tiene características totalmente contrarias a la literatura anterior, porque ya es una novela Realista: Flaubert sitúa la acción en ambientes normales que tienen que ser reconocibles por los posibles lectores, por lo que tiene que hacer descripciones muy detalladas. Le interesa sobretodo dar a conocer el por qué actúa Emma como lo hace, al igual que el resto de los personajes, y por ello, en la novela nos describe con detalle los estados de ánimo por los que pasan, sobretodo el de Emma. No sólo describe el exterior, sino, sobretodo, el interior de los protagonistas. Además, no nos lleva a lugares lejanos, a otras épocas históricas, sino que a lo largo de la novela y con descripciones precisas, nos da testimonio de la sociedad en la que vive, de las clases sociales que existían, de las costumbres, de los vestidos, de las casas, de los oficios de entonces, etc… Porque la descripción minuciosa es una de las características de las Novelas Realistas. Tal vez ahora se entienda por qué Flaubert la utiliza tan abundantemente en Madame Bobary.
Pero, ¿me ha gustado? Pues sí. Me ha ido enganchando poco a poco y el final me ha parecido intenso, vibrante, espectacular. Las descripciones no me han cansado ni me han aburrido, más bien me parecía que una cámara cinematográfica hacía un recorrido por sitios, lugares, expresiones, rostros, acciones, etc..., mostrando la vida de los personajes momento a momento. Y me ha gustado muchísimo cómo a lo largo de la novela describe los distintos estados de ánimo de Emma: desde la búsqueda obsesiva de un amor idealizado, pasando por el desengaño y el sufrimiento debido a la traición de sus amantes, y terminando por la desesperación de no encontrar la salida para una vida arruinada económica y sentimentalmente. Realmente, sólo puedo terminar diciendo: ¡Pobre Emma!
Tanto como pobre Enma tampoco, la verdad es que el final del libro es súper intenso, pero no diría pobre Enma. Todo en ella es,obsesivo a Rodolfo le cansa, a León le exprime, ya no sabia que hacer para deshacerse de ella, y lo de las compras clama al cielo, la verdad es que el comerciante la engaña vil mente,pero esque ella es tonta, va a pedirle que retire la denuncia y sale con telas.... La verdad es que el final estaba cantado... No tenia control...
ResponderEliminarPero repito me ha gustado.
Puri
¿Por qué digo “Pobre Emma”?
ResponderEliminarPorque una mujer que fue capaz de REBELARSE contra todos los convencionalismos de su época y que buscaba su felicidad sin preocuparse de las normas que la sociedad de entonces les exigía a las mujeres, merecía haber sido más feliz, merecía que hubiese encontrado lo que buscaba y sobre todo, que no terminase como terminó.
Es una pena, porque toda su vida fue un desastre (unas veces lo propiciaba ella y otras eran los demás los que no la correspondían), pero desastre al fin y al cabo. Resumo:
- no supo apreciar el amor que le mostraban las dos personas que realmente la quisieron, su marido y su hija
- sus amantes sólo buscaban en ella los buenos ratos sexuales, pero no la correspondieron sentimentalmente nunca. Tal vez León al principio, pero no fue valiente para ir “más allá” con sus sentimientos
- ella solita fue hundiéndose en deudas viendo sólo las ventajas de un mundo de lujo. Aquí se ve claramente el influjo de las lecturas y el no saber discernir entre lo que podía y no podía llegar a tener
- Por último, el suicidio. Cuando alguien no encuentra salida para su vida es porque su vida es una total decepción para ella misma. Tanto si ha sido su culpa o si las circunstancias también la han empujado a ello. Y realmente, ella tuvo mucha culpa. Pero es una pena que cualquier persona, sean cuales sean sus circunstancias, tenga que llegar a ese final.
Por tanto, si analizo TODA su vida y sobre todo el FINAL que ella misma decidió, algo de lástima me da. Por eso digo lo de “pobre Emma”.
Coincido con mucho de lo dicho: al final se torna más veloz e interesante con un buen estilo para su época; pero pensando desde afuera, está es una novela de otros tiempos, y con la mentalidad de esa época. Es posible que en su tiempo rompiera muchos esquemas literarios. Pero visto desde hoy, no dejo de creer que el autor era un machita que dibuja a una mujer que se da a la mala vida y que por ello sufre su justo castigo. Y que el marido era un calzonazos cornudo y por ello, también le pasa todas esas desgracias, al no llevar bien puesto los pantalones en su casa. En fin, es un libro más para ver cómo se pensaba en un tiempo de cambios, histórico, conectado con la ilustración y la revolución francesa, cuando se empezó a cuestionar los valores eternos de: religión, estado y familia. Es casi una novela historia o historificada.
ResponderEliminarJesús Rocha